“Las zorras, las águilas y las liebres” es una de las famosas fábulas infantiles cortas de Esopo, que nos hace reflexionar sobre la importancia de calcular bien nuestras fuerzas, antes de solidarizarnos con alguien y decidirnos a cooperar con él.
Se cuenta que hace mucho tiempo, las águilas le declararon la guerra a las liebres y como ellas no podían volar y eran más pequeñas, decidieron pedirle apoyo a las zorras.
Las liebres habían oído que las zorras eran muy inteligentes, astutas y pensaron que serían de gran ayuda.
De tal manera, las liebres buscaron a las zorras y al encontrarlas les dijeron:
– Hola zorras, venimos hasta acá porque necesitamos su ayuda, estamos en guerra contra las águilas y sin su apoyo, seguramente no podremos ganar este conflicto.
Ante esta petición, una zorra le respondió:
– Seguramente las hubiéramos ayudado, si no supiéramos quienes son y contra quienes luchan.
Podemos interpretar la moraleja de esta fábula corta de Esopo, de la siguiente manera:
Si te piden que te unas a un bando para una confrontación, piensa muy bien en las capacidades de tus posibles adversarios y si es necesario participar en un conflicto ajeno.