Errare humanum est, reza el dicho latino, que traducido significa que todos nos equivocamos, pues el error forma parte de nuestra condición. Cuando eso sucede hay que reconocerlo, aceptarlo y aprender de él para evitar que se repita, justo lo contrario de lo que hicieron los cuatro protagonistas de nuestra historia de hoy.
Una noche, cuatro estudiantes universitarios estuvieron de fiesta hasta altas horas de la noche y por lo tanto no estudiaron para el examen que tenían programado para el día siguiente.
Por la mañana, a sabiendas de que no estaban preparados para enfrentarse a la prueba, pensaron en un plan: Se ensuciaron con grasa y tierra haciéndose para por desaliñados.
Después fueron al despacho del decano de la asignatura, el mismo que les iba a examinar. Una vez allí le explicaron que el día anterior habían ido a una boda de un amigo común y en el camino de regreso la rueda del coche en el que viajaban había estallado. Como no tenían rueda de repuesto se vieron obligados a empujar el automóvil durante varios kilómetros, por lo que no estaban en condiciones óptimas de realizar el examen.
Tras escuchar la versión de sus alumnos, el decano permaneció en silencio, meditando, por espacio de un minutos. Tras la pausa se dirigió a ellos para decirles:
—De acuerdo. Les doy la oportunidad de examinarse dentro de tres días.
Los cuatro estudiantes le agradecieron su comprensión y le aseguraron que estarían preparados para realizar la prueba en la fecha que les acababa de indicar.
Al tercer día comparecieron ante el decano. Este les hizo saber que ya que se trataba de una prueba bajo condiciones muy especiales, dadas las circunstancias, cada uno de ellos debía sentarse en un aula distinta. Todos estuvieron de acuerdo, puesto que se habían preparado lo suficientemente bien en los últimos tres días.
Una vez sentados en sus sillas el profesor recorrió las cuatro aulas para entregarles la hoja del examen con las cuestiones planteadas que debían contestar. Para sorpresa de los alumnos la prueba solo constaba de dos preguntas para un valor total de 100 puntos:
Primera pregunta (valor: 1 punto):
¿Cuál es tu nombre? _________________
Segunda pregunta (valor: 99 puntos):
¿Cuál de las cuatro ruedas se reventó? Indica la opción acertada: ____
- Delantera izquierda.
- Delantera derecha
- Trasera izquierda
- Trasera derecha.
Moraleja: Sé responsable de tus actos y apechuga con las posibles consecuencias que se deriven. De lo contrario, quedarás en evidencia y aprenderás una desagradable lección.